Las redes sociales nos han atrapado en una espiral en la que no vivo ni contigo ni sin ti, una paradoja de la vida contemporánea en donde todo lo sólido se desvanece en el aire.
Limitar opciones de comunicación también es una falta de accesibilidad y esto ocurre cuando los servicios de mensajería dejan de ser una elección y pasan a ser una obligación.